El macarrón es una galleta tradicional francesa que se dio a conocer en el siglo XVI, actualmente su receta ha variado tanto que se realizan en variados colores y sabores. Estas galletas se han vuelto tan populares que no pueden faltar en la mesa de dulces de una celebración. A continuación encontrarás una receta básica para realizar estas delicias.
Materiales que necesitarás:
• Báscula de cocina
• Procesador de alimentos / picadora
• Colador (o tamizador)
• Bols
• Batidora manual de varillas o batidora eléctrica
• Espátula de silicona
• Manga pastelera
• Boquilla redonda (nº 12)
• Bandeja de horno
• Papel de hornear o tapete antiadherente tipo “Silpat”
• Plantilla para macarons (opcional)
Los ingredientes (Para 10 macarons rellenos)
• 50 grs Almendra molida
• 100 grs Azúcar glass
• 20 grs Azúcar granulado (mejor si es extrafino)
• 60 grs Claras de huevo (unas 2 claras)
• 1/6 cdta Cremor tártaro (o una pizca de sal)
• Colorante comestible (si las deseas teñir)
¡A COCINAR!
1. COMBINA LOS INGREDIENTES SECOS
Coloca la almendra molida y el azúcar glass en el mismo boles y remuévelos con una cuchara. Tritúralos con el procesador alrededor de 1-2 minutos. Tamiza esta mezcla 2 veces y deshecha los grumos que no pasen por el colador, de esta manera podrás obtener una mezcla más suave, uniforme y sin grumos visibles.
2. PREPARA EL MERENGUE
Bate las claras de huevo con el batidor de varillas a velocidad media hasta que empiecen a salir muchas burbujas en la superficie ligeramente espumosas y líquidas. Obtendrás una consistencia similar al agua con jabón, añade el cremor tártaro o la pizca de sal. Sigue batiendo a velocidad media hasta que consigas una espuma blanca y más opaca, con más consistencia.
Una vez alcanzada la ligera espuma con picos suaves, sube a velocidad muy alta y bate hasta montar las claras “a punto de nieve”. Será tan firme que al meter y sacar las varillas del bol repetidamente se formarán picos consistentes y duros en la superficie de la mezcla. Si quieres añadir colorante comestible para teñir tus macarons, hazlo justo cuando el merengue comienza a ser consistente y firme; bate sólo hasta integrar el color.
3. REALIZA EL MACARRONAGE:
Añade los ingredientes secos en el bol donde está el merengue, hazlo gradualmente 3 veces. Luego toma la espátula de silicona y mezcla con movimientos suaves y envolventes. Se suelen necesitar unos 50 movimientos aproximadamente para conseguir la textura adecuada. Como resultado tendrás una mezcla fluida, homogénea y brillante, sin rastros visibles de ingredientes secos.
4. FORMA LAS CONCHAS
Acopla una boquilla redonda nº 12 en tu manga pastelera y rellénala con la anterior mezcla, usando la espátula de silicona y siendo muy cuidadoso al hacerlo, el merengue debe tratarse con delicadeza. Luego forra una bandeja con papel de hornear o un tapete antiadherente. Si quieres conchas del mismo tamaño, sin tenerlas que hacer a ojo, coloca una plantilla debajo del papel de hornear. Si no tienes una, puedes hacer tu propia plantilla en casa.
Ejerce presión sobre la manga pastelera, que debe de estar complemente vertical, y forma las conchas sobre el papel de hornear o plantilla. Al acabar, retira con cuidado la plantilla. Deja caer con firmeza la bandeja de hornear contra la encimera un par de veces. De este modo lograrás eliminar las posibles burbujas de aire y picos que se hayan formado.
5. DÉJALOS SECAR
Deja las conchas secarse en la misma bandeja de hornear alrededor de 1–2 horas, o hasta que ya no estén pegajosas. Se habrá formado una ligera y fina capa que notarás al tocarlas suavemente. No te saltes este importante paso, aunque requiera de espera y paciencia, ya que los macarons deben perder humedad y generar la mencionada capa externa. Esta capa ayudará a que el macaron forme el conocidísimo pie durante el proceso de horneado. Si no haces este proceso tus macarons podrían abrirse por arriba y no formar el pie durante el horneado.
6. LLÉVALOS AL HORNO
En un horno precalentado a 150º, hornea los macarons alrededor de 10-14 minutos. Es difícil establecer un tiempo de horneado fijo, así que debes estar atenta a partir de los 10 min. Estarán listos cuando el pie se haya formado y suenen huecos al darles toques con la yema del dedo, una fina capa se romperá. No dejes que tus macarons se doren en la superficie. Cuando estén listos, sácalos del horno y déjalos enfriar durante 5-10 minutos en la misma bandeja. Tras ello, colócalas en una rejilla para que se enfríen.
7. RELLENA TU MACARRONES
Cuando se encuentren completamente fríos, rellénalos con lo que te apetezca: ganache de chocolate, mermelada, crema de avellanas, leche condensada, dulce de leche, entre otros. Es más fácil rellenarlos con una manga pastelera, aplicando el relleno sólo en la base de la mitad de las conchas. Debes ser cuidadoso al manejarlas, pues son frágiles y se pueden romper fácilmente. Combina un par de conchas como si fueran un sandwich (una con relleno-una sin), aprieta ligeramente para repartir bien la crema, y ya tienes tus macarons listos.
Ahora que sabes la receta, varíala un poco y realiza macarons de diversos tamaños, formas, sabores y colores ¡Pon volar tu imaginación y deslumbra a tus invitados con este delicioso postre!
